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| EL GAUCHO RELÁMPAGO Italia, 1873 - Bs. As., 30 / mayo / 1936 |
En 1887, en la década en que se dice que nació
el tango, la cuarta parte de la población de Buenos Aires, algo más de 100.000
habitantes, eran italianos y muchos de ellos contribuyeron en la creación,
difusión o ejecución de los primeros tangos.
Uno
de esos precursores fue Carlo Doménico Nasca, nacido en Italia en 1872. Nasca es
el paradigma del italiano acriollado; vestía de gaucho y se le veía
frecuentemente por las calles del centro montado en un zaino con apero
"chapeado", cabestro y riendas con virola de plata y era popularmente
conocido como "El Gaucho Relámpago".
Nasca
fue un pionero del disco criollo ya que en 1912 comenzó a editar discos de diversos interpretes y
también sus propias versiones de valses, mazurcas y tangos,
muchos de ellos de su autoría, con “La Rondalla del Gaucho Relámpago”, que él dirigía.
Era un criollo
hecho y derecho. Adiestraba caballos y tenía una tropilla que alquilaba a los
circos donde se representaban obras nativas. Lamentablemente, su afición por
los caballos le jugó una mala pasada porque murió por las complicaciones de una
coz que le propinó uno de los animales que poseía.
Omar Menvielle pintó maravillosamente a esos italianos agauchados en los versos que siguen, titulados
“Come cualquier arquentino”
Mo gusta cimarroneare
come cualquier camposino
e com'el gaucho arquentino
también me gusta peliare.
Me gusta de quineteare...
lo banco de la cocina;
sentir l'olor a la china
cuando é má fuerte e jediondo,
e me gusta irm'en el fondo,
com'el pioqu'e la gayina.
Mo gus'andar imabrrado
com'el chanch'en el chiquer,
e me gust'al camp'oler
l'olor a zorrine meado.
No gay que ser delecado
pe'salir a pastoreare;
hay que saber aguantare
con la guasca'e lo destino,
e com'el gauch' arquentino
tirar lo lazo e volteare
Mo gusta salire in viaque
de reser'in cualquier lade,
e como soy namorade
también mo gusta el himbraque.
Mi 'acomodo intr' el gauchaque
con me bota e me bombacha
o se gay una mochacha
que no quiere cabestriare
también la sé quinetiare
e amansala con la guacha.
Mo gusta cantá melonga
a l'estile de la pampa,
e come´l zorro´ n la trampa
la quitarra me rozonga.
E se la cosa é mestoga
e lo bailongue é folero,
ma revuelque con me cuero
e me doy vuelta insigüita,
e come vaca parita
me voy buscand'al ternero.
Yo soy el gaucho sen grupe
com'el petiso nochere
e se gaie da comere
come bien también e chupe,
Despué te revuelc'al truque
al mecor gaucho ladino,
e se me tom'algún vino
de caprichoso ca soy
agarr'el charré é me voy...
¡Come cualquier arquentino!.
El tango que se adjunta es “El Caburé”, de Arturo de Bassi, por la Rondalla del Gaucho Relámpago. La grabación es de 1914, con evidentes defectos sonoros, pero constituye un interesante documento historico-musical.
Y aquí por Roberto Firpo – Año 1915
